jueves, 28 de febrero de 2013

LA MANO

         Cuando la poesía empezó a ser algo importante, en los años en que descubrí a Felipe Benítez Reyes o a Vicente Gallego, poetas inaugurales para mí, no me paraba a preguntarme cómo lo hacían, dónde introducían una imagen, cómo comenzaban el poema o preparaban su final, ni me paraba a contar las sílabas. Aun así, creo que, de una manera inconsciente, sí apreciaba esos y otros aspectos formales como parte fundamental de su seducción verbal. No creo que por no fijarme en sus entresijos dejara de disfrutar plenamente de aquellos poemas inolvidables. Cuando comencé a prestar también atención a la mano que movía la marioneta, en especial a la medida de los versos, aquella pulsión rítmica se convirtió en condición indispensable de la poesía que leía primero y escribía después. 

Disiento del tópico según el cual se disfruta más un arte cuanto mayor conocimiento se tenga de él. Se disfruta de una manera distinta. A veces más honda; pero otras ese conocimiento atenúa o difiere el goce al desviar el foco de nuestra atención de lo esencial. Tantas veces se sorprende uno perdiéndose parte del sentido del poema por prestar más atención a dónde caen los acentos...


Inscripción en la iglesia de Sos del Rey Catótico
("De toda palabra ociosa
darán los hombres cuenta rigurosa")

lunes, 25 de febrero de 2013

BEST-SELLER

      Cada vez que pregunto a un conocido con el que tengo la suficiente confianza por qué se ha embaulado tal o cual best-seller y me responde que algo tendrá cuando lo han leído equis millones de personas en todo el mundo, no puedo reprimir la versión chistosa de un viejo anuncio televisivo: come mierda, un millón de moscas no pueden estar equivocadas.

sábado, 23 de febrero de 2013

LOS DOS

        Escucho discutir a dos jóvenes por haber acudido a distintos lugares a la hora en que habían quedado. Cuando se cansan de culparse mutuamente, el menos cerril zanja la cuestión diciendo que en un malentendido nadie tiene la culpa. Los dos tienen la culpa.

martes, 19 de febrero de 2013

DEPRISA, DEPRISA

         Encuentro esta prosa descabalada en una libreta antigua. Aunque los ejemplos no son de hoy lo que cuentan (lo que cuenta), ay, sí lo es.

*   *   *        

        “Ya nuestra vida es tiempo”, escribió Machado en un breve poema, y, en un aforismo igualmente memorable: “El hombre es el animal que mide su tiempo”. Pero igual que hay distintas maneras de medir el tiempo, hay también distintas formas de vivir en él, de las cuales la más penosa y frecuente es vivir contra el tiempo.

Paseo por León. De regreso a casa advierto en un cruce que han cambiado el semáforo de peatones. Al antiguo, en el que el hombrecillo en verde lucía estático hasta que parpadeaba para cambiar a rojo, lo han sustituido por otro en el que camina mientras se nos muestra el tiempo que resta para cerrarse. A falta de siete segundos su marcha se vuelve más rápida. Llama la atención la inclinación del tronco, como en esos velocistas que pretenden arañar unas centésimas al cruzar la línea de meta. Le falta sacar la lengua como Bolt. Antes, uno sólo apretaba el paso si el semáforo comenzaba a parpadear mientras cruzaba. Ahora, si unos metros antes de llegar a él observa que restan pocos segundos para que se ponga rojo, una nueva preocupación le hará avivar el paso. En definitiva, para el que vive en la prisa una fuente más de ansiedad, y para el que trata de evitarla, una nueva invitación para que se una al club.

Llego a casa. Mientras ceno veo la televisión. Dice una voz: “Publicidad. Volvemos en dos minutos”. Cambio. Leo en la pantalla: “Volvemos en 37 segundos”. Cambio. Parece que todas las cadenas se han puesto de acuerdo para pasar a la vez a la publicidad. En uno de los anuncios, de RENFE, dice una voz en off: “Ya no importa la distancia que hay entre dos puntos, sino el tiempo que tardas en recorrerla”. Como si el del viaje fuera un tiempo perdido, como si leer, dormir, escuchar música o mirar por la ventanilla un paisaje que se convierte en espejo de nuestro pensar, no fueran precisamente una de las mejores maneras de aprovechar el tiempo. Y dicho sea de paso, ¿justifica una inversión tan costosa como la alta velocidad el hecho de tardar media o una hora menos en un desplazamiento? ¿Es realmente la obra pública, así enfocada, una inversión de futuro? Apago.

Entro en Internet para ver la previsión meteorológica del fin de semana. Tecleo “tiempo” en el buscador y aparecen en la pantalla entradas como estas: “Cómo ahorrar tiempo en la mañana”, “Ahorra tiempo peinándote”, “Mamás emprendedoras: 7 tips para ahorrar tiempo”, o, atención, “Trucos curiosos: cómo ahorrar tiempo pelando patatas”. Quién podría evitar cliquear en esa página. Es lo malo de la red, uno se dispersa. Y más que podría dispersarse, pues en una esquina de la nueva ventana le invitan nada menos que a ver a “la chica con el trasero más grande, redondito y durito del mundo”. Me parece que no estoy ahorrando tiempo precisamente.

Ya nuestra vida es tiempo, sí, y si algo espera uno de la vejez es que vuelva a dejar de serlo.
 

jueves, 14 de febrero de 2013

SINTAXIS PERSONAL

        Ni punto y coma, ni punto y aparte ni punto seguido. La mayoría de nuestras pausas son punto y veremos.

Castillo de Coca

domingo, 10 de febrero de 2013

LO CONTRARIO DE LA LITERATURA

     Impresionante documental de “En portada” sobre la explotación infantil en Perú. La imagen de decenas de personas hozando en ardua competencia entre los desperdicios ajenos, recién expulsados por los camiones, es sencillamente espeluznante. Un niño de tres años roe los huesos de un pollo que recoge directamente del suelo. Hoy ha tenido suerte. Una adolescente rescata sonriente un pantalón vaquero que no tardará en probarse a pesar de su extrema suciedad. Otro niño devora el casquete de una sandía. Además de que no tengo ganas, no sé cómo pudiera hacer literatura de esto.

martes, 5 de febrero de 2013

UN AIRE NUEVO

       La cebada que rompe decidida la tierra, las cigüeñas que vuelven, el sol pujante de días que se alargan, algazara menuda de herrerillos, como desengrasada bicicleta, los primeros almendros florecidos, una nueva -tan vieja- primavera llamando a nuestra puerta. Una nostalgia distinta a la del otoño, que como aquella irá encontrando sus músicas y tal vez sus poemas.

 
Melody´s echo chamber: "Follow you", de
 Melody´s echo chamber (2012)

viernes, 1 de febrero de 2013

EDIPO REVISITED

(A Enrique García-Máiquez)

        Por lo visto el Real Madrid empleó en su último partido el sistema 4-2-3-1. Habría mucho que hablar, y me temo que poco bueno. Pero a lo que vamos, la cosa me ha sugerido un final sobre final para el conocido acertijo que la Esfinge planteó a Edipo: el hombre es el animal que camina en su infancia sobre cuatro patas, sobre dos siendo adulto, en la vejez sobre tres y, en el último trance, sobre una, la de Dios.