martes, 5 de marzo de 2013

NO PASA EL TIEMPO

        G. tiene el reflejo de, antes de encender un cigarrillo, mirar a derecha e izquierda. Media vida fumando a escondidas del padre y la otra media a escondidas del hijo.

4 comentarios:

  1. Uno se puede acostumbrar a la dosis de transgresión igual que a la de nicotina. Y no concebir la una sin la otra.

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  2. No había pensado en ese placer de la transgresión. Bien visto.

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  3. Oh. Qué bueno y cómo recoge el aire —el humo— de nuestra época o de dos épocas, que nos han cogido por medio.

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  4. A Víctor Botas sí:


    Sería
    muchísimo mejor que no fumara
    tanto,
    me dicen
    ceñudos los doctores.
    Imposible
    seguir tan buen consejo:
    este humo
    que vuela entre mis dedos (no comprenden
    nada) es la
    contestación de un conformista,
    la sola valentía que aún me queda.

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