domingo, 13 de enero de 2013

LA MÚSICA HENDEDORA

       Afortunadamente nunca se está a salvo. En los lugares menos propicios, en los quehaceres más prosaicos, en los momentos más insospechados, la que no hace rehenes, la que primero dispara y luego pregunta, la nostalgia. 
 
Poco ha hecho falta esta vez: una cafetería, la cuña radiofónica de un banco y las primeras notas de una canción que dormía, con un ojo abierto, en alguna vuelta del recuerdo, tanto nos ha sacudido al despertar. Y como suele ocurrir, la impresión sonora se abría a lo olfativo, a lo táctil, a lo visual: Kevin Arnold en el baile de fin de curso abrazado a su pequeño amor rubio que compartíamos, sus corazones demasiado pequeños mecidos por una de aquellas maravillosas canciones de aquellos maravillosos años, los sesenta, tanto más maravillosos por no haberlos vivido.

                                     Tommy James and The Shondells: "Crimson and clover" (1969)

No hay comentarios:

Publicar un comentario