El cantante de la orquesta de anoche, para reforzar el mensaje de una
canción titulada “Resistencia”, se arrancó con un discurso
antigubernamental con el pretexto de que el trombonista era
venezolano. Es curioso: tanto los partidarios de Chávez como sus
detractores se apoyan para validar sus tesis en un mismo ideario
supuestamente revolucionario.
No me resisto a la idea de que el parlamento de la nación es como una enorme orquesta de pachanga con tubas hechas de termostatos, violines con cajas de zapatos, arpas con somieres, en fin...y los instrumentistas desafinan una barbaridad. Celebro, Sergio, que, ya libre de tus obligaciones, nos obsequies con estas reflexiones tamizadas de una fina ironía.
ResponderEliminarUn abrazo
Manuel