Tuve un sueño curioso. Soñé que alguien del pueblo, que había leído el poema "Nieve en Zazuar", me censuraba el hecho de que en la era no había habido ningún carro desde hacía muchos años. Pero lo importante no es que no lo hubiera en el momento en que se escribió el poema, sino que pudiera haberlo, como los hubo antaño. En poesía, en literatura, en arte, importa más la verosimilitud que la verdad.
Los versos de ese poema caen con la lentitud exacta de la nieve, y cualquiera que haya visto nevar se reconoce en ellos. Después de ese pequeño milagro, a quién le importa si había o no había carro. Más que la verosimilitud importa la versosimilitud. Ahí está la verdad del poema.
ResponderEliminarVersosimilitud como verosimilitud del verso. Qué bueno, me lo apunto. Gracias.
ResponderEliminarSergio.